Muy buenas tardes! Hace tiempo, aunque en málaga hemos aguantado bastante el calorcito, me puse a sacar los zapatos mas de invierno. Y cuál fue mi sorpresa cuando vi que algunos estaban sin tapillas!
Ninguna, por que a principios de primavera ya dije que los llevaría al zapatero y al final no lo hice y ahí se han quedado todo el verano. El caso es que como tenia tapillas de repuesto de las que te suelen venir con los zapatos pues me dije, manos a la obra!
Lo primero es sacar el resto de tapilla que tenemos.
Yo lo hago con unas tenazas, o si no podéis usar unos alicates.
Hay veces que la tapilla vieja esta tan gastada que es practicamente imposible agarrarla por ninguna parte, e irremediablemente tengo que llevar los zapatos al zapatero.
Lo más importante es asegurarse de que agarras bien la cabeza del tornillo, sin que se resbale y sin llegar a pillar lo que es el tacón en si. Y sacar el Hulk que llevamos dentro!!
Yo, como el zapato estaba un poco desgastado lo pinte con permanente negro para disimularlo. Tanto la punta del tacón como un rayón que tenía.
La verdad es que se quedo bastante bien. Ya por último, solo hay que meter la tapilla por el agujero y darle un par de golpecitos con un martillo para que se meta bien para dentro.
No suelo echarle pegamento ni nada, por si se vuelve a romper poder sacarla otra vez.
Cambiar las tapillas no tiene mucho merito, es algo sencillo, aunque lo malo es conseguir las tapillas en sí por que sinceramente no se donde comprarlas, por eso cuando uso las que vienen con los zapatos ya después tengo que llevarlos al zapatero, pero bueno si me puedo ahorrar unas cuantas veces pues ya está!
Esto es todo por hoy, espero que os sea útil!
Hasta el próximo post!
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